Existen varios métodos para llevar a cabo un análisis de la competencia: Análisis de documentos públicos: consiste en revisar documentos como informes financieros, prensa especializada, páginas web, registros mercantiles, etc. Estudio de mercado: consiste en realizar encuestas o entrevistas a clientes, proveedores, representantes del sector, etc. Análisis de datos: consiste en procesar y analizar datos como datos demográficos, datos de ventas, datos de mercado, etc. Análisis DAFO: consiste en identificar los puntos fuertes, los puntos débiles, las oportunidades y las amenazas de una determinada empresa o sector. Benchmarking: consiste en comparar el rendimiento y las actividades de una empresa con los de sus competidores. Mystery Shopping: consiste en hacerse pasar por comprador en las tiendas de un competidor para conocer sus ofertas, precios y calidad de servicio. Seguimiento de las redes sociales: consiste en seguir y analizar las actividades de los competidores en diversos canales de las redes sociales. Para ello pueden utilizarse herramientas como brand24, que permiten obtener resultados de múltiples fuentes de datos sobre la competencia.